jueves, 27 de noviembre de 2014

Alma. capítulo 3.

Suena el timbre y Carla me mira con expresión triunfante, esa expresión que solo le sale cuando consigue lo que quiere... Vamos, siempre. Me pongo los cascos y justo cuando le doy al play empieza la temida oleada de preguntas:
-¿De qué habéis hablado? ¿Es tímida? ¿Habéis quedado? ¿te ha confesado que le gustas?
-De tu fiesta, y de los exámenes, la he invitado a tu fiesta y no, no me lo ha confesado. Porque no le gusto.
-Alma, no me jodas. Hasta un ciego se daría cuenta de que le gustas.
-Eres una exagerada.

Las clases se pasan rápido, todo el mundo con prisas porque es viernes y ha quedado con sus amigos, o  simplemente tienen prisa por salir de este lugar.  Pero muy a  mi pesar tengo que ir a comprar ropa con Carla. Ella quiere que me ponga un vestido para mañana por la noche, já. No se lo cree ni ella.
Llego a mi casa y mi Madrastra, Amanda me saluda con amabilidad.

-Hola, Alma. ¿qué tal las clases?-Dice mientras se sirve café en la cocina.
-Pues como siempre, aunque ha faltado la profesora de Inglés a primera hora. Podría haberme quedado durmiendo más tiempo.
-Eres muy vaga hija, ¿lo sabías?
-Soy consciente de ello.-Digo entre carcajadas.

La relación con mi Madrastra es bastante buena, aunque en ocasiones nos ignoremos o choquemos siempre lo acabamos arreglando, tiene mucho carácter, al igual que yo y eso hace que discutamos muchísmo. No sé que le pasa los viernes que siempre está de buen humor. Me parece que se está tirando a su profesor de Yoga.

-Amanda, ¿Me darías dinero para ir de compras con Carla?
-¡Oh Dios mio hija sabía que este momento llegaría tarde o temprano¡ Claro, toma 100 euros.
-¿No es mucho?
-Es suficiente, no lo haces muy a menudo.
-Bueno, vale. Hasta luego.


Voy con paso ligero, ya que he quedado con Carla a las 17:00 y son las 16:50. Carla siempre llega tarde, no hay ocasión que quedemos y sea puntual y eso me pone muy nerviosa, soy demasiado puntual. Son las 17:10 y por fin la veo de lejos.

-Tú y tu característica puntualidad.-Digo con sarcasmo.
-No te pongas así Alma, es que tenía que hacer muchas cosas...
-¿Cómo qué?
-Esto...Bueno...
-¿Lo ves? Eres muy tonta, que lo sepas.
-Pero soy encantadora.
-Anda, vamos al autobús que se nos echa el tiempo encima.


El trayecto hacia el centro no es muy largo y llegamos en unos 20 minutos, el centro de la ciudad está abarrotado de gente de aquí para allá, turistas haciendo fotos a todo lo que se mueve, suelo venir mucho al centro a dar una vuelta, es un lugar muy bonito y  no sé porque pero me calma. A lo lejos vemos el centro comercial, un edificio en su mayoría de cristal, con 10 plantas y gente saliendo y entrando y saliendo cada segundo.

-Alma, ¿Tienes algún vestido en mente?-Pregunta Carla.
-¿qué te hace pensar que voy a comprarme un vestido? Tengo 100 euros, podría comprarme...Libros, videojuegos...
-Tú sigues en tu línea, anda, vamos a mirar algún vestido, seguro que al menos uno te gusta.


Caminamos un largo rato hasta que una tienda me convence y decidimos entrar, pero justo cuando cruzamos la puerta siento que una gran fuerza tira de mi brazo hacia atrás y caigo al suelo, solo siento un gran golpe en la espalda y veo que un hombre en chándal  sale corriendo con mi bolso, va esquivando personas rápidamente hasta que dos guardias del centro comercial lo tiran al suelo, mi única reacción es correr hacia ese sitio, con un dolor agudo en la espalda me paro en seco y Carla preocupada me ayuda a llegar hasta los guardias.
-Chicas, ¿El bolso es de alguna de vosotras-Pregunta uno de ellos.
-Sí, es mío.
-Ya hemos avisado a la policía, llegarán en breves momentos, le agradeceríamos que se quedara y fuera con ellos hacia la comisaría para poner una denuncia a este ladrón.

La gente conmocionada observaba con expectación al ladrón que estaba esposado de pie entre los dos guardias. La policía no tarda en llegar y uno de ellos se lleva al ladrón y lo mete en el coche patrulla, su compañero nos empieza a tomar los datos a Carla y a mí y nos guía hasta el otro coche para dirigirnos hacia la comisaría más cercana. Cuándo llegamos vemos que se llevan al encapuchado a otra sala, mientras nosotras ponemos la denuncia, pero detrás del policía veo un cartel con un hombre, el rostro de un hombre que nunca se me borrará de la mente, era la cara de Charles Hernández, el asesino de mis padres.

lunes, 25 de agosto de 2014

Del "que bonito" al "que vomito" hay un paso.

Todos los días veo parejitas felices a mi alrededor, no  me quejo. Muchas serán felices, tendrán una casa, una mascota, un desahucio que evitar juntos... Lo normal. Algunos incluso tendrán hijos, se llevarán bien con sus suegr...No eso no, tendrán un trabaj...Joder eso tampoco. Tendrán amor, que al final es lo que importa, o eso dicen las películas, ¿Verdad? Los films lo pintan todo como una historia de amor en la que dos protagonistas (Porque la poligamia no está aceptada.) pasan por dificultades como terceras personas, recuerdos del pasado, enfermedades venéreas... Cuando se acerca el final de la película simulan como que las pobres perdices son asesinadas y sirven como alimento a dos amantes suicidas que se apoltronarán en una casa, en una rutina, en un estilo de vida.

Pero nadie piensa en lo que sucede cuando empiezan los créditos y se funde la pantalla en negro, nadie sabe como continua, como acaba la historia porque sus finales son más abiertos que las puertas de un lupanar. Aunque lo peor son las historias que relatan la historia de amor entre un malote y una niña con un estandar social alto, siempre siguen el mismo argumento, chico malo y mujeriego empieza a sentir algo por una chica que no había visto en su puta vida, la chica lo rechaza pero se masturba pensando en él por las noches, bueno como no es políticamente correcto digamos que "piensa" en él todas las noches y se enamora. Empiezan a verse, todo muy bonito hasta que surge una dificultad enorme que impide la continuidad de la relación, pero que al final se soluciona, follan y se acaba la historia.

Lo gracioso del asunto es la influencia que tienen en las personas, las hacen querer una historia de amor igual, y solo buscan ese prototipo de persona, aunque luego se """enamoren""" de un hijo de puta o de una zorra. 

Hoy en día el término enamorarse ha perdido el significado. El amor perdió el significado cuando el dinero y la apariencia ganaron protagonismo. Aunque no nos engañemos, todos somos superficiales. La belleza es muy relativa, la chica que a mi me puede poner el asunto más duro que un misil balístico...Bueno, perdón. La chica que a mi me puede parecer guapa a ti te puede parecer más fea que chewbacca recién levantado.

Al grano, todos buscamos a alguien que complete nuestro puzzle emocional, pero durante el proceso encontramos a gente que puede darnos alguna pieza de dicho puzzle o directamente romperlo en pedazos.
Disfrutad del proceso, no sabéis cuanto tiempo os queda.

Por último, los tipos de pareja hay algunos que sinceramente son el uno para el otro, pero hay otros que me hacen cogerle hastío al """"amor"""" los que no paran de discutir, cortar, volver. Discutir, cortar, volver. En ese orden. Y luego están las parejas que no sé como no son diabéticos de todas las cosas bonitas que se dicen, pero cada uno tiene sus gustos, pero una palabra bonita, un halago en el momento justo hace más que mil mimos cada dos minutos.
Y es por eso que del "Que bonito." al "Que vomito." hay un paso.







Hace mucho que no escribía, esto no es muy largo pero llevaba meses sin poner algo aquí, esto es un preludio de lo que vendrá en posteriores fechas. Si lees esto y  te ha gustado me harías un enorme favor, no olvides like, favoritos y suscribir...Mierda esto no es you tube. ¡Hasta otra!

martes, 15 de abril de 2014

"Escribir."

Porque puedo ser un Dios y  gobernar a todo mi mundo, o  puedo ser un simple vasallo gobernado con la mano de hierro de algún horrible dictador.
Puedo ser un refugiado judío, puedo ser un frío soldado nazi. Puedo desatar guerras, destruir el universo, crear enfermedades, hacer aparecer los monstruos más horribles que puedan existir. También puedo ser alguien bueno, puedo ser el más bello animal. Puedo ser un ave para surcar los cielos, ver desde arriba a todos los demás, sentirme grande y tan pequeño a la vez, reírme de los animales porque no pueden llegar tan alto, puedo hacer bello lo más banal. Lo cotidiano hacerlo emocionante, lo más monótono hacerlo interesante. Puedo ser un llanto desgarrador, una lágrima que brota como lluvia de unos ojos cansados de aguantar la inminente llegada de las lágrimas, una lágrima que desfila elegantemente por unas mejillas y morir en unos labios para siempre. Puedo ser un vil verdugo, acabar con la vida de millones de personas o puedo salvarlas y ser el bueno para luego ser asesinado por el malo. Puedo luchar contra dragones, ogros, monstruos de leyenda solo para recibir un beso de mi amada, puedo ser una mujer fuerte, que no depende de nadie, y a pesar de las represalias que tienen algunas personas con las mujeres, seguir adelante. Puedo crear un "para siempre" de verdad, o romper corazones y crear mentiras para engatusar a la gente. Puedo enamorar con solo un bolígrafo y un papel, un poco de imaginación y listo. Eso es la felicidad, quedarte escribiendo hasta bien entrada la noche.
Por eso, soy dueño de mi propio mundo. Por eso, mi mundo está entre las páginas de un libro, mi mundo está entre las teclas de un ordenador, mi mundo está en la tinta de un boli derramada sobre el papel. Por eso...
Mi mundo es escribir.

viernes, 11 de abril de 2014

El flautista de Hamelín al que le tocaron la flauta...Pero bien.

Hace muchos años en un poblado perdido de la mano de Dios vivía un hombre desdichado, dejado, sin ninguna virtud llamado Bran. Cada vez perdía más y más pelo, engordaba más, cada vez se hacía más pobre y su suerte con las mujeres no era del todo buena. Siempre había sido rechazado, solo mantenía relaciones sexuales con meretrices y la mayoría se alejaban de él diciéndole cosas ofensivas como que preferían cortarse los genitales antes de dejarse tocar por él y cosas de ese mismo índole. Digamos que no era agraciado en ningún aspecto.

Rechazado por sus padres, por sus compañeros, incluso por su perro. Este hombre ya no tenía ninguna razón de vivir. Lo único bueno que tenía es que era perseverante, en sus labores cotidianas ponía un empeño más que sobresaliente, en el amor era igual pero al final de un tiempo desistía y claro, eso le sentaba mal.
Un día por el centro del poblado, cerca del mercado, paseaba por sus áridas calles chocándose con las demás personas que lo miraban con asco, o con las mulas que llevaban productos recién recogidos de las huertas. Detectó un olor poco habitual, un aroma embriagador que seduciría hasta a la persona más mojigata. Siguió ese olor y lo llevó hasta un puesto alejado de todos los demás, era de aspecto lúgubre pero elegante, las telas negras, azabaches, granates que colgaban sobre el techo le daban sobriedad y en un sillón de aspecto cómodo estaba un apuesto hombre. Este hombre era alto, musculoso, con unos fríos ojos grises que con solo una mirada te congelan el alma, vestía ropas propias de la nobleza. ¿Qué haría un noble en un puesto con la plebe? Es extraño, pero Bran estaba tan ebrio por causa de ese olor que no se preguntaba nada. El señor se aparta un mechón rubio de su cara, deja ver sus facciones no muy profundas y no aparenta tener más de 35 años.

-Hola buen hombre, ¿desea algo?-Dice el noble.
-Eh... Pues mire señor, si le soy sincero no se que hago aquí, siento las molestias, ya me voy, por favor no se lo tome como una afrenta y tenga piedad.
-No, tranquilo Bran. No es para nada algo ofensivo para mi. No sabes que haces aquí porque te he traído yo.
-Pero...Señor, ¿cómo sabe mi nombre si me permite saberlo?
-Porque yo soy Satanás, el diablo, Belcebú, el Príncipe de las tinieblas. Como prefieras llamarme.
-No, no es posible. Dios se apiade de mi alma y me proteja de cualquier ataque del mal.
-Joder, Bran. Vuelves a rezar y te juro que será la última vez que lo hagas.
-¡Señor perdóneme!
-Parece que no tienes fe en tu Dios... Me gusta. Te preguntarás para que te he traído aquí.
-Si señor.
-Pues es muy simple, te he traído aquí para cambiar tu suerte, para ser aceptado por todos, para ser admirado por todos y sobretodo... para ser amado... por todas.
-P...Pero señor, ¿Cómo va a hacer eso?
-Es muy simple. Coge esta flauta. Pero antes debes firmar este papel. Para obtener todo lo que quieres debes darme tu alma y todo será tuyo.
-Tendré mujeres, éxito, dinero, poder, un miembro más grande... ¡Firmo!-Exclamaba mientras garabateaba en el papel.
-Bien Bran, cógela.

Bran la cogió y se fue hacia el poblado dejando a Satanás atrás. Era una flauta de color negro con partes bañadas en oro que relucía como la más bella joya. Se dispuso a tocarla y sus dedos se movían solos, tapaban y destapaban los agujeros de el instrumento con una habilidad pasmosa. Toda la gente se giraba al verle pasar. Llegó a su casa pero... No había casa, en su lugar había un enorme castillo de roca gris casi plateado con tejados blancos que apuntaban hacia el cielo. Entró y vio una larga alfombra roja como la sangre, unas largas escaleras llevaban a su cuarto y allí había una cama de dos metros de largo y de ancho. Se giró y no vio a Bran. Vio a un hombre alto, musculoso, con ropas elegantes, pelo oscuro y ojos verdes.
Era el poder de la flauta, era rico, guapo, la tenía más grande y desprendía ese mismo olor que Satanás y  le encantaba. Se paró a pensar en que ya no iba a ser dueño de su alma y le entró el pánico. Pero se miró al espejo y se le pasó. Esa misma noche alguien tocó a su puerta interrumpiendo su bella canción con la flauta. Abrió la puerta y era una chica de unos 25 años con un rostro sin imperfecciones, una mirada angelical y un cuerpo para pecar con él durante 1000 eternidades. Se apartó su cabello negro y dejó ver sus oscuros ojos, profundos como pozos.
-Perdone señor, perdone la insolencia pero ¿podría quedarme a pasar la noche aquí en su casa?
-Claro, ningún problema. Lo que pasa es que las habitaciones no están disponibles.-Mintió.-Y tendríamos que dormir en el mismo cuarto.
-Oh, será un honor señor.

La dejó pasar, subieron las escaleras directos al cuarto cuando Bran se puso a tocar la flauta de nuevo.
Era una melodía deliciosa, muy suave pero intensa, era una experiencia auditiva sobresaliente.

-Señor Bran, usted toca muy bien la flauta. ¿Es igual de hábil con los dedos en otros campos como por ejemplo...El sexo?
-Por supuesto que si y no solo con los dedos.

La chica se lanza encima de Bran y le empieza a lamer el cuello, Bran gime casi imperceptiblemente. Posa sus manos en el trasero de la bella dama pero un ruido proveniente de la puerta los interrumpe. Alguien llama a la puerta otra vez. Esta vez es una chica rubia con mucho pecho y con relativamente poca ropa comparado con el frío que hacía a esas horas. Estuvieron conversando cuando sin previo aviso la chica morena llamada Cassandra se lanza sobre Carla, la chica rubia. Sus lenguas se entrelazan con una armonía envidiable, daba gusto ver eso, como se manoseaban, como palpaban sus cuerpos encendidos en un baile lleno de gemidos, placer... Bran las separa y se pone a tocar la flauta, algo parece reaccionar en las chicas, se hacen más salvajes y directamente le bajan los pantalones a nuestro protagonista.  Deja al aire su gran erección.

-Rubia, aquí hay trabajo para las dos.-Dice Cassandra.

Le hacen una felación a Bran y él gime,  un torbellino de sensaciones aparece dentro de él, placer, felicidad, pasión... Cambian y ahora Carla está a cuatro patas mientras Cassandra se pone debajo de ella. Bran, ya desnudo le mete el pene hasta el fondo y Carla grita de placer, a su vez Cassandra posa su mano en su clítoris y lo frota lentamente y luego más y más rápido. Es algo delicioso y ninguno de los tres quería que ese momento acabara nunca, los movimientos eran cada vez más salvajes, los sonidos eran más provocativos y la noche era muy larga, cada postura, cada embestida, todo era perfecto. En un momento determinado se tumbaron en la cama y la chica rubia se posó sobre el pene de él y Cassandra puso su vagina encima de la cara de Bran, lamía todo rincón de su vagina, su lengua se movía vertiginosamente. Ella gemía de placer y como las chicas estaban cara a cara comenzaron a besarse alocadamente mientras el orgasmo era inminente...De nuevo. Pasaron toda la noche así.



Al día siguiente Bran se despertó sin nadie a su lado. Solo quedaba el recuerdo de esa apasionada noche.
El resto del día se pasó el día entero tocando la flauta, se había dado cuenta de que la flauta atraía a las bellas mujeres y le hacía tener relaciones con ellas. Pasó un mes maravilloso, pero todas las mujeres desaparecían a la mañana siguiente. Era un suceso bastante extraño. No le dio importancia.
Una noche cualquiera se puso a tocar la flauta, como todos los días y no vino una chica, vinieron 7 chicas, de diferentes etnias, pero todas eran guapísimas y a Bran eso le gustaba. Una orgía, pensó.
 Todas se desnudaron y al unísono se tiraron al suelo y se pusieron a cuatro patas. Seguían el sonido de la flauta, Bran caminaba despacio y ellas le seguían por todo el cuarto y luego se fueron al cuarto. Eso era una vorágine de sexo sin control, fluidos, cosas obscenas, gemidos, azotes, miradas lascivas, Bran se lo pasaba en grande, y ellas también. Dos de las chicas se pusieron a hacer un 69 durante largo rato, se corrieron varias veces.
Bran cogió a la chica pelirroja por el pelo y tiró su cabeza para atrás. Ella gemía alocadamente y no paraba de embestirla mientras otra chica morena le ponía su vagina enfrente de la cara de la pelirroja claramente para que le hiciera sexo oral. Tres de las chicas comenzaron a tocarse entre ellas y a mojarse aún más. Bran ya no podía más habían estado toda la noche teniendo sexo. Bran al final se corrió y obtuvo el mejor orgasmo de su vida. Pero la mañana siguiente se despertó y no había nadie.

Esa tarde Satanás se le volvió a aparecer y le dijo que las mujeres desaparecían porque después de tener sexo la flauta se llevaba su alma al infierno. Estaba haciendo de verdugo de decenas de mujeres, además se dio cuenta de que solo buscaba el amor, no buscaba al solo carnal. Utilizaba a las mujeres como objetos desechables y se sintió tan culpable por todo lo ocurrido que se suicidó ahorcándose en lo alto de su lujoso castillo.







                                                            FIN.

jueves, 10 de abril de 2014

Los elegidos por los Dioses.28

No lo entiendo, había escuchado algo de los "elegidos" pero no que había más de uno. No puede ser, me han estado espiando todo este tiempo. Lo de Matt no fue un accidente, fue un asesinato. No puede ser. ¿Estaba todo planeado? ¿Desde cuándo me han estado estudiando? ¿Siempre ha sido así? Tantas preguntas sin respuesta. Necesito saber muchas cosas, ¿habrá algún espía más? Tengo la cabeza hecha un hervidero, tengo que salir de aquí antes de que me descubran. Salgo corriendo por el largo pasillo hasta las escaleras. Son aproximadamente dos pisos por debajo del nivel normal así que los subo lo más rápido que puedo, con el corazón latiéndome a toda velocidad llego a duras penas a la planta baja, me dirijo con paso tranquilo a mi residencia. Me encuentro en mi cama una nota que pone lo siguiente: " Eick te espero en el bosque a las 16:00. Lea." ¿que querrá ahora? Son las 15:50 así que me apresuro en salir de la residencia y me noto nervioso, el corazón me late muy deprisa y creo que se me va asalir del pecho de un momento a otro. Voy llegando al bosque y veo una silueta sentada en una piedra, se gira y fija sus ojos verdes en mi. Es Lea, con una expresión que no es su típica expresión de "soy la mejor y nada puede conmigo" es más de preocupación.

-Eick, menos mal que has llegado.
-¿qué quieres?
-Van a por ti.
-¿quién?
-La doctora Klein y su organización.
-¿quién?
-La doctora que viste a través de esa puerta.
-¿Pero como lo sabes?
-Porque te seguí. No podía dejarte solo si la cosa se hubiera puesto fea o si llegan a hacer experimentos contigo.
-Pero no lo entiendo, Lea. ¿Cómo sabes tú eso? Es que a caso eres...
-Si, Eick. Una elegida.
-Pero.. como... No puede ser.
-¿qué te pensabas? ¿qué eras el único elegido? Te queda mucho para aprender, señor Campbell.
-Es que no me lo puedo creer.
-Eick, eres un elegido por Kailec, el Dios Kai. El guerrero más fuerte que ha existido jamás. Eres similar a un semidiós pero tú no eres hijo de un Dios, estás destinado a hacer grandes cosas. Te puede haber tocado cualquier poder que tenga que ver con la lucha. Tú Dios es muy polivalente, al contrario que yo... Yo soy una elegida por Metklin, se puede considerar que es la Diosa de la sabiduría. Gracias a ella, nuestra tecnología avanza a pasos agigantados y de nuestra rama salen los futuros científicos, médicos, eruditos en general...
-Lea, me sé esa historia pero no comprendo porque me cuentas todo esto.
-Porque me gustas, Eick. Ya lo sabes, te lo dije en el baño. Y te lo vuelvo a decir, y te lo diría el resto de mi vida... Si me dejas. Y porque yo era una espía de esa organización. Me ordenaron espiarte para obtener información sobre ti. Pero desde el primer momento en que te vi sabía que iba a fallar mi misión, si sigo así posiblemente acabe como Matt, pero si es por ti soy capaz de todo, me da igual si me cuesta la vida si lo que me queda la paso contigo. Ya todo me da igual y odio ponerme sentimental, lo odio con todo mi ser pero ese es el efecto que causas en mi. Que te quede claro. Y ya me callo porque si sigo ya no voy a detenerme.

Y la beso. Choco sus labios con los míos y siento una cálida sensación en mi estómago y no quiero que este momento se acabe, que estemos para siempre así de juntos. Que se pare el tiempo pero me separo de ella y la miro fijamente.

-Pues si somos los elegidos, debemos acabar con esto.
-¿Y Kath?
-Dudo que sienta lo mismo que yo, tiene amnesia. Y no se acordará de todos esos momentos. No creo que se recupere.
-Nunca se sabe.
-Tiene amnesia y el recuerdo más reciente que tiene es el de su hermano fallecido a su lado. Creo que tengo que ir a visitarla.
-Ve con ella, Eick. Yo me voy que he tenido un día muy movido.

La veo alejarse y cuando ya se pierde entre las abarrotadas calles me voy corriendo al hospital.

lunes, 7 de abril de 2014

Alma. Capítulo 2.

Se acaba Hell above justo cuando llego a la puerta de mi instituto,  y ya huele a porros, que raro. Los niños pijos que van de malotes no saben hacer otra cosa, solamente fuman para aparentar. Para ligar, lo que no saben es que se ven penosos. Entro por la puerta chocándome con todo el mundo, huele a sudor, colonia, espuma para el pelo... Y es un olor asqueroso, de verdad. No veo la hora de superar este angosto y largo pasillo repleto de gente hasta llegar a mi clase, es Jueves y eso no mejora las cosas. Porque el sábado hay una fiesta en casa de Carla, creo que de verdad es de las pocas que valen la pena de este instituto. Y ella me va a obligar a ir allí. No puedo decirle que no, su enfado sería similar al de una Diosa del Olimpo.


Por fin llego a clase y como de costumbre me siento en la penúltima fila justo entre Carla que está delante mía y Damián, el chulito de turno, un poligonero más que lo único que sabe hacer bien es tocar los cojones.

-Oye, bolli.-Dice Damián con desdén.-¿Qué tal estás?
-Si no me hablas estaré mejor que nunca, ¿queda claro?
-Mira, te relajas si no quieres que...
-¿Qué me vas a hacer tú? Asqueroso.
-Mira, me callo porque me das pena.
-En lugar de dar pena te tendrían quedar un pene, para que tengas la boca llena un rato, que sé que te gusta.
-¡A ver chicos, se acabó la discusión!-Interrumpe Maira, la Profesora de Ciencias sociales.-Comenzamos tema nuevo, mitología griega. Bien, ¿qué sabéis a cerca de este tema?
-Que la gente se aburría y creó la mitología.-Dice Fabián, otro perrito faldero de Damián.




La clase se me pasó volando, es la hora del patio y el sol previo a mediodía me da en plena cara, hace un día de verano y la verdad es que no lo he desaprovechado. Llevo mi camiseta de Paramore, mi gorra y unos pantalones cortos que dice Carla que me quedan fenomenal.
Siento un codazo en el costado y es Carla que me mira de forma extraña y lleva su mirada hacia Victoria, la verdad es que me llama la atención, parece tímida, y creo que nunca he tenido que insultarla al contrario que al resto de mi clase. He visto que Juan, un amigo mío habla bastante con ella y me da pena cuando se mete con su altura. Aunque lo haga de forma graciosa.


El sol le da de pleno en el pelo y lo vuelve rojizo, semejante al vino. Será teñido seguramente. Pero eso es lo de menos. De repente tengo ganas de hablarle pero por otro lado a lo mejor pasa de mi y no quiere hablarme, o directamente piensa lo mismo que el resto de la clase: Que soy una chica que solo trae problemas a los de su alrededor y que solo piensa en pegar y faltar el respeto a la gente. Pero como no soy de hablar sin saber no voy a decir nada.

-Alma.-Dice Carla.-Durante estas semanas me he fijado en que Victoria te echa unas cuantas miraditas eh.
-Serán alucinaciones tuyas.
-No creo que ponerse roja cada vez que la miras sean alucinaciones mías.
-A lo mejor le pasa eso con todo el mundo.
-A lo mejor quiere que tú seas el suyo.
-Por los Dioses, Carla. Eso es tan pasteloso que me han dado ganas de vomitar arcoiris.
-Háblale, tonta.
-Vale, vale.


Me siento nerviosa de repente y el corazón se me dispara y creo que me van a fallar las piernas...¿por qué? Si nunca hemos hablado directamente, no entiendo el porque de esta sensación. Cinco, cuatro pasos, tres escasos, dos, un paso...


-Hola, Vic.
-H-Hola, A-A-Alma.
-¿Por qué hablas así?-Pregunto en tono tranquilizador.
-P-Pues no lo sé, pero b-bueno. ¿Cómo estás?
-Muy bien. ¿Y tú?
-Bueno, más o menos.
-¿Por? ¿Se han metido los poligoneros estos contigo otra vez?
-No, no... Tranquilízate. Solo estoy agobiada por los exámenes y ahora que has venido tú pues se me ha
olvidado tod...-Se tpa la boca pero ya lo había dicho todo. Yo, sonrojada no sabía que decir.
-Eh...¿Te apetecería venir a la fiesta de Clara el sábado?
-Yo es que no soy muy de fiestas.
-Yo tampoco, pero es que tú y Clara sois las únicas que me caen bien de esa clase. Bueno y Juan pero el va a otra clase. Va, hazlo por mi.
-Vale, iré entonces. Bueno Alma, me tengo que ir, nos vemos mañana.
-Vale, hasta mañana.-Digo con una sonrisa sincera en mi rostro, la primera en mucho tiempo. El sol cae mientras la veo alejarse al final del patio.

domingo, 6 de abril de 2014

Alma. Capítulo 1: El comienzo.

Hola, me llamo Alma y seré una futura asesina. Buena presentación, ¿Verdad? No sé si te preguntarás porque digo que seré una asesina pero lo seré por una sencilla razón: Por venganza. Hace unos años, exactamente cuando tenía 3 años yo vivía con mis padres plácidamente en un pequeño pueblo. Todo normal hasta que por unos negocios que tenía mi padre unos narcotraficantes le estuvieron jodiendo la vida durante semanas. Se ve que mi padre no podía pagarles el dinero que debía y le dieron un ultimatum. O pagaba o lo mataban. Mi padre pasó una mala semana pensando en como pagarles el dinero y al fin llegó el día de pago pero el no tenía el dinero. Ellos volaron la puerta de mi casa, entraron tres hombres con traje y con armas, mi padre muy nervioso y más pálido que nunca se volvió hacia nosotras y nos dijo que huyéramos pero mi madre se quedó clavada en el sitio con la misma expresión que mi padre, yo no entendía nada pero el narcotraficante le preguntó por el dinero, mi padre no lo tenía.

Sabéis como acabó mi padre, ¿Verdad? En efecto, acabó como un colador. Los disparos sonaban en mis infantiles oídos con unas atronadoras explosiones. Me puse a llorar y mi madre corrió hacia mi padre y ella también fue asesinada. Entonces el señor del traje blanco le ordeno a los que tenían las armas que las bajaran. Se acercó a mi y me dijo unas palabras que nunca conseguiré olvidar:"Niña, aún eres muy pequeña. Como ves he matado a tus padres, cuando crezcas querrás asesinarme así que crece, y píllate un buen arma. Me llamo Charles Hernández, recuérdalo. Hasta otra."

Nunca me olvidaré de eso, además... Tuvo razón. Lo mataré y me quitaré este gran peso de encima. Ahora a mis 16 años quiero investigar sobre sus movimientos, sus negocios y lo más importante... Dónde está.
Desde ese día he sido una chica muy agresiva e independiente, he sido conflictiva y eso me ha llevado a ser adoptada por diferentes familias y que estas mismas me rechazaran. La gente se metía conmigo, ya sea por mi aspecto, o porque soy lesbiana, el mundo no da asco, son las personas que son asquerosas, por eso nunca he confiado en nadie y  dudo que lo haga, el mundo me ha hecho demasiado daño. Lo único bueno que tiene este mundo son los libros y la música, los utilizo para desconectar de todo. Me refugio en el olor a libro nuevo, en los solos de las guitarras, en las rimas de algún rapero, en las palabras de un escritor. Todo eso, es mejor que vosotros. Es bastante contradictorio la verdad, pero eso no se puede cambiar. 


Ahora vivo en la ciudad rodeada de pijas que solo hablan de ropa, de gallitos que se chulean con sus motos y sus crestas y de gente intolerante y homófoba que no nos quiere aquí. Puede que entre toda esta bola de imbéciles haya una persona, al menos una persona que de verdad valga la pena y quiero encontrarla cuanto antes.  Soy muy fuerte pero en momentos de debilidad a veces un abrazo es lo mejor.

Ahora mismo mi situación no es buena, la policía me tiene fichada por vandalismo, hacer graffitis, ya ves tú que vandalismo. En mi instituto toda la clase me rechaza y me tiene asco, en este caso el asco es recíproco. ¿cómo no voy a odiar a unas personas que su objetivo en la vida es bajarle la autoestima a los demás, cultivarse el cuerpo pero no el cerebro y salir en las portadas de las revistas de el corazón? ¿Cómo no voy a odiarlos si dicen que mi música da asco y que leer es de imbéciles y frikis sin vida? Que les follen, parecen fotocopias. Lo peor es que se meten conmigo por que me gustan las personas de mi mismo sexo y eso es lo que más me cabrea, que una panda de retrasados venga a dar una opinión que no he pedido, como si ser lesbiana fuera algo malo. Más de uno se ha llevado unos cuantos moratones en el cuerpo por tocarme las narices, me niego a callarme ante tales "personas", bastante me ha costado vivir como para que venga otro a joderme la vida. Insultos como "muérete", "vete de aquí bollera", "das asco" ya me han afectado lo suficiente, en ocasiones anteriores he llegado a casi quitarme la vida pero he sido fuerte y he luchado por mi misma de un modo que nadie pueda conmigo, algún día me las pagarán.


Soy Alma y esta es mi historia. 

Tengo que ir al insituto así que me pongo a Pierce the veil y me marcho.

Un mensaje.

Esto es un mensaje para todas esas personas que pasan un mal momento, para todas esas personas que no tienen ganas ni de respirar, para todas esas persona que quieren dejarlo todo o que simplemente están deprimidas por diferentes sucesos, quiero que sepan que la vida es demasiado corta como para ahogarse en un mar de incertidumbre, para caerse en el pozo de la tristeza porque cuando más hondo estés más difícil será salir.

Cada persona es un mundo y ese mundo se contamina con los problemas del día a día. Si alguien lee esto y tiene problemas que sepas que vas a tener muchos a lo largo de tu vida y que te va a costar solucionarlos. Algunos más que otros. Pero no decaigas, sé fuerte, nadie te dice que no te quejes, que no llores, que no grites a los cuatro vientos que estás mal, que te lo guardes para ti. Nadie te va a obligar a estar bien pero piensa en el tiempo. Todo ese tiempo perdido cuando lloras podrías haberlo empleado en sonreír que nunca está de más.

No te rindas, si tienes personas de confianza recurre a ellas, si de verdad les importas harán lo que sea necesario para ayudarte, si ríen contigo también tienen que llorar contigo. Cuando le importas a alguien no duda en ayudarte, quiere verte sonreír y simplemente quiere ayudar.

Todo el mundo tiene malas rachas, todo el mundo tiene malos ratos pero si no luchas por estar bien ¿qué te queda? Hay veces que nos cansamos de luchar y dejamos que las cosas sigan su curso normal y esperar un golpe de suerte que nos saque de esta mierda.

Pero la vida no está hecha para hacer cosas normales.

Nadie dijo que ser feliz fuera fácil, es verdad que la felicidad es efímera en comparación con la tristeza pero ¿Y qué? La felicidad se busca, la felicidad puede estar en la calle, puede estar dentro de ti, puede estar en esa persona especial o puede estar en otra persona pero lo que pasa es que no te has fijado en ella.

No seamos cómodos y sal fuera, que la calle no está para mirarla desde la ventana, hay que coger el toro por los cuernos e intentar y lograr tu ansiada felicidad.

Es verdad que hay mucho estúpido que te intenta hacer la vida imposible o simplemente hay personas a las que les tienes cariño pero son emocionalmente muy inestables, excesivamente inestables. Es difícil lidiar con ello pero no desistas, hay varias opciones: O pasar o solucionarlo de una vez por todas, refúgiate en personas que te ayuden y sean sinceros contigo.


Y como ya he dicho antes:


La vida no está hecha para hacer cosas normales.


                                                                             



                                                     Fin del mensaje.

viernes, 28 de marzo de 2014

Quisiera.

Muchas veces he pensado en mil maneras de torturarte, en mil maneras de hacerte sufrir, en mil maneras de hacer que sintieras el verdadero significado de la palabra: "Miedo". Quisiera dejarte inconsciente atarte de pies y manos en una silla cualquiera, despertarte con una jarra de agua fría. Quisiera que te despertaras aturdida, asustada y perdida. Sin saber donde estás, sin saber que haces aquí, sin saber... Como salir de este tormentoso lugar lleno de herramientas del mal, herramientas de uso cotidiano que si caen en las manos de un perturbado psicópata puede llegar a ser mortal. Quisiera susurrarte al oído que tu vida ya tiene fecha de caducidad, que este lugar será tu tumba, que serás como una vela que se consume, como un juguete roto. Porque ahora me perteneces, eres el juguete que voy a romper para siempre. Quisiera lamer cada una de tus lágrimas que para ti serían saladas pero para mi serían un dulce manjar. Ver tu cara contraída de miedo, terror, ver como suplicas, escucharte pedir ayuda. Aunque sabes que nadie, absolutamente nadie te va a escuchar. Quisiera estrangularte hasta que se te inyectaran los ojos en sangre, hasta que se te notaran las venas de la cara y tu color de piel fuera semejante al vino. Hacerte decenas de torturas con una suave música ambiente de fondo y que saborearas cada miembro amputado, que sintieras cada punzada de dolor. Eso quisiera, que sintieras como tu vida se apaga poco a poco y murieras de la manera más horrible posible.

jueves, 13 de marzo de 2014

Los elegidos por los Dioses 27.

Salgo del baño muy desconcertado por lo que acababa de pasar, había besado a Lea. Estoy con Kath, pero en realidad no, ella no recuerda nada. Estoy seguro que ni siquiera me quiere. Es normal que en lo único que piense es en su hermano Matt. Creo que me voy a ir al centro de la ciudad un rato.
Me visto y como es de costumbre de negro con vaqueros azules bastante ajustados. Salgo con paso ligero de mi habitación cuando veo a Alexia ensimismada mirando su dispositivo de muñeca. Parece alarmada, su rostro es de piedra con una ligera mueca de preocupación pero que no entorpece su belleza ni juventud. Tendrá unos 25 años, y ya es líder. Para la corta edad que aparenta ser líder es un grandísimo logro. Escondido en una esquina espío su conversación y de repente se va rápidamente escaleras abajo por el largo pasillo. No sé porque pero quiero perseguirla, no lo entiendo. Yo me iba al centro pero mi instinto me dice que siga a Alexia.



Su pelo naranja pierde su intensidad con la tenue luz de los pisos de abajo que nunca he visitado. Son largos pasillos con suelo de mármol, techos altos y paredes color marrón claro, me recuerda a un hospital. De repente percibo un olor a químicos y a alcohol, ¿estoy en un hospital? Odio los hospitales, y odio su olor.
Ella se para en seco y se gira hacia mi, pero logro escabullirme a tiempo. Parece preocupada por algo y acelera el paso. Rápidamente me incorporo y veo que entra en una puerta a lo lejos, voy corriendo lo más rápido que puedo y casi me choco con la puerta, el corazón me va a mil y por momentos pienso que me va a descubrir por el sonido de los latidos. Me tranquilizo y veo que esta entreabierta abro un poco la puerta y distingo dos siluetas. Son Alexia y Zack con una señora que no conozco, es rubia con mirada astuta, ojos azules y lleva una bata médica pulcra. Sus gafas reflejan las caras de los líderes y me concentro para entender la conversación.

-... algunos datos sobre ellos.-Dice la mujer rubia.-Hemos estado estudiando sus movimientos y destaca una fuerza descomunal que aún desconoce y una agilidad inusual en sus movimientos que destacan por encima de los otros sujetos.
-¿Cree que es uno de ellos?-Añade Zack.
-No es nada seguro, nosotros no lo podemos comprobar. Matt tardó demasiado en traer información sobre el chico y su vínculo se estrechaba. Cada vez se hacían más amigos y temíamos que se le fuera a escapar algo del proyecto E.
-No era necesario acabar con él.-Espetó Alexia con rabia contenida.- Tan solo una advertencia un lavado de cerebro. Pero eso ha sido demasiado radical.
-Cállese, no tiene ni idea de la envergadura de este proyecto que intentamos llevar a cabo por el bien de todos. Él no es el único que manifiesta poderes fuera de lo normal. En los Drok también hay dos más y en la superficie habrá más seguramente que por su mentalidad no lograremos detectar a los Elegidos.
-¡Pero si ni siquiera sabe verficar si es un elegido o no!
-Usted puede ser una líder pero este es mi proyecto, y este es mi lugar. El sujeto Eick Campbell será investigado a fondo.
- ¿Y qué hay de la chica?
-Ella tiene una astucia fuera de lo común pero es perversa, ella también será investigada pero hay diferentes campos en este proyecto. Al fin y al cabo son varios elegidos.

Felicidades, Celia.

Bueno, llego un poco tarde pero bueno, este texto va dirigido a una persona en particular así que a partir de aquí puedes dejar de leer si lo ves necesario.



Bien, todo empezó un 28 de Mayo en una playa de Málaga a la que fui en contra de mi voluntad porque odio la playa, era un día nublado, pero hacía el típico calor malagueño que tanto me gusta, éramos muchos, yo estaba absorto, ensimismado con Paramore sonando en mis oidos, estaba relajado mientras los otros socializaban y jugaban al fútbol entre la arena o simplemente se zambullían en el frío mar. La arena se me metía entre los dedos y me cambié de sitio, me giro rápidamente y a unos 50 metros empiezo a divisar a varias personas en su mayoría chicas (se agradece el detalle) que vienen directo hacia nosotros.
Me quito mis gafas de sol, la gorra se me escapa y corro hacia ella, cuando vuelvo, esas mismas personas se sientan junto a nosotros y se saludan entre ellos, yo no conocía a nadie de las que venían pero sin previo aviso se me acerca una chica de largo pelo negro y rizado con rostro sonriente y es la protagonista de este texto. Recuerdo que sonreí al momento en que me saludo porque yo soy bastante tímido y me cuesta empezar conversaciones con alguien que no conozco. Yo saludé débilmente y empezamos a hablar, luego entre amigos míos y amigos suyos empezamos a hacer el tonto (cosa que me encanta). Al cabo de un rato yo tomé la iniciativa y comencé a hablarle, cosa rara en mi. Todo el grupo comenzó a avanzar y caminamos hasta un gran Burger King me senté en un banco y varias personas incluida ella se sentaron en la misma mesa, comenzamos a hablar bastante y da la casualidad de que teníamos varias cosas en común. Por eso entre todas las personas destacables que conocí en el proyecto ARCE está Celia, claramente. Fue una semana breve pero me encantó, fue suficiente para darme cuenta lo maravillosa persona que era y a día de hoy echo de menos como me estiraba los mofletes. Eso es una de las cosas que más echo de menos, aunque a veces me hicieras daño. Aunque he de discrepar en que no soy nada "cuqui" como tú dices. No sé como lo verás, al cabo de unos meses volví a Málaga y la verdad esa noche en la feria no esperaba que me vieras sin yo verte primero y tampoco me esperaba que tú y Sofi me saltaráis encima cual violadoras y gritándome en la oreja pero bueno, a pesar de eso la verdad es que lo volvería a repetir. Espero que esa no fuera la última vez que nos veamos, como no tengo dinero y estás muy lejos pues escribo algo para que sepas que no me he olvidado para nada de ti. Venga, acabo ya. Muchas felicidades y espero que mi caja aún esté en buen estado. Te quiero mucho.

Mírame arder.

Mírame arder, quiero ser la llama ambiciosa que quiere fundirlo todo a su paso. He de ser el mejor, dicen que por cada cosa que hagas habrá miles que lo sepan hacer mejor que tú ¿y qué? He de ser ambicioso y perseverar, he de ser el ejemplo a seguir, no algo efímero cual llama de vela sino una llamarada persistente que nadie pueda apagar. Que nadie se meta en mi camino, porque para ser el mejor tengo que currármelo y acabar con todo lo malo que se interponga entre mi objetivo y yo. No es ego, es ambición. Mucha gente con ánimo de minar la moral al soñador intenta cortarle las alas diciendo que no lo conseguirá, que es un chulo, que es un prepotente, que solo piensa en si mismo. Pues no, la humildad es importante, sí. Pero está sobrevalorada. Tienes que creértelo, se el mejor, puede que haya gente superior en X cosas pero tu deber es superarlos y que la gente te odie, te envidie, te intente destruir con sus lenguas viperinas cargadas del veneno mortal de la envidia. Con ojos inyectados en sangre te verán conseguir tu ansiado premio, lágrimas de ira caerán sobre sus mejillas contraídas en una horrorosa mueca de odio y gritos ofensivos, insultos a ti ya los tuyos lanzarán como balas. Pero eso es lo de menos.


Mírame arder porque alumbraré la oscuridad de sus almas con una luz cálida y potente, fuerte pero delicada, una luz que sea imposible de apagar. ¿Veis el sol? Allí puse mi objetivo, lo quiero sobrepasar. Mírame arder porque cuando llegue mi fuego acabará con todo lo ofensivo. Mírame arder porque será un espectáculo digno de ver, mucha gente me verá como alguien insignificante y débil. Pero se equivocan, soy el mayor volcán jamás visto, y cuando entre en erupción verán lo majestuoso que puedo llegar a ser.
Tan solo mírame arder.
Es un texto breve pero intento que sea lo más intenso posible porque ese es mi objetivo, plasmar mis sentimientos en cada tecla de este ordenador y que al menos una persona sea capaz de leer estas líneas porque voy a seguir escribiendo me apoyen o no, me lean o no, me amen o no, me odien o no. Porque esto...
Porque esto es lo mío.

miércoles, 19 de febrero de 2014

Los elegidos por los Dioses. 26.

Es una imagen grotesca y desagradable, ver a Matt tan débil, tan frío e inerte me produce escalofríos. Kath no parece dar crédito a lo que ve, grita desconsoladamente mientras los médicos le sacan tubos, sondas y demás aparatos extraños.
No puedo verlo así, y noto que las lágrimas descienden desordenadamente por mis mejillas, Matt está interte. Se me parte el alma al verlo así.

-¡No se lo lleven! ¡Está vivo aún está vivo!-Grita Kath desconsoladamente.- No os lo llevéis...
-Kath, lo siento de verdad pero tu hermano ya no está.-Dice el doctor.
-¡Dejadlo, está vivo!

Un médico coge una jeringuilla y se la introduce en el brazo, poco a poco cesan sus gritos. Kath se queda dormida. Me intento calmar pero lo único en lo que puedo pensar es en Matt, fue la primera persona que conocí de este lugar, me salvó la vida y ahora está... Muerto. A causa de un fallo cardíaco. Un enfermero me indica que tengo que salir y solo quiero dormir. No quiero saber como estará Kath cuando despierte. Con amnesia, un hermano muerto y yo confundido entre Lea y Kath. No sé que más puede salir mal.

Llego a mi residencia y no hay nadie, los líderes me han concedido una semana de descanso por todo lo ocurrido. No quiero saber nada de nadie, solo quiero dormir.

Cuando me despierto el sol ya está en lo alto y se me pegan las sábanas, me despierto sudado y con un dolor de cabeza notable. He soñado con gritos, lágrimas y hospitales. No ha sido una buena noche.
Cojo ropa limpia y me voy a las duchas. Que suerte. Cuando termino, me doy cuenta de que no he traído la toalla. Viva mi inteligencia. Pero alguien toca la puerta, que coincidencia. Muy a mi pesar es Lea con una toalla blanca en el brazo.

-¿Qué haces tú aquí?-Digo con contundencia.
-Traerte una toalla, ¿No lo ves?
-Vale, gracias. Pero dámela y vete.
-No, hasta que salgas por tu propio pie. O eso o te expones a salir en pelotas por todo el edificio. ¿Qué prefieres? ¿Qué te vea yo o todo el mundo?
-Eres retorcida.
-Lo sé, pero eso es lo que te gusta de mi. Lo directa que soy ¿Verdad?
-Hablaremos sobre eso después. Ahora dame la toalla.
-Ya sabes lo que tienes que hacer.

Sin rodeos salgo con todo el cuerpo mojado y voy como una exhalación a por la toalla pero Lea se aparta en el momento justo.

-Vaya vaya, por fin conozco al Gran...Gran señor Campbell.
-Dame la toalla.
-Tú dame un beso.
-Esto no es justo.
-Lo que no es justo es que yo esté detrás tuya mientras tú le comes el culo a Kath cuando ella tiene amnesia y no siente lo mismo por ti. Ahora dame un beso o te quedas sin toalla  harás el ridículo...Bueno, casi.

Con una mezcla de ansia, rabia y excitación voy hacia ella y la beso. Nuestras lenguas se buscan la una a la otra, es un beso largo de los que te dejan con ganas de más ella sube sus manos hacia mis hombros, yo pongo mis manos en su cintura mientras nuestros labios se juntan una y otra vez.

-Así me gusta, y toma la toalla y póntela, aunque te la podrías poner sin manos seguro.

martes, 28 de enero de 2014

Fanfic. THG.

Me dieron por muerta, y de hecho estuve en el filo entre la vida y la muerte durante mucho tiempo. Desde que cayeron los paracaidas con esas bombas creadas por Gale no he vuelto a ser la misma, me he dado cuenta de que es bueno ayudar a los demás pero también tienes que luchar por tu propio beneficio. Soy Primrose Everdeen, y esta es mi historia.

Me he enterado de que los juegos se han termimado, los distritos se han unido y todo Panem ha vuelto a la normalidad, fuera de la superficialidad del capitolio. Fuera de la opresión de los agentes de la paz. Fuera del miedo a ser escogido  en la cosecha. Han habido unos últimos juegos con gente del capitolio y esta vez era en un escenario partido en cuatro partes bastante grandes, una era un bosque, otra eran varias islas con un peligroso mar lleno de mutos creados artificialmente, la otra zona era una ciudad destruida y la final era un páramo desierto con apenas agua y un sol de justicia. Todo para rememorar lo que sufrieron los tributos. Katherin Falls fue la ganadora de estos últimos juegos, pero justo cuando iban a coronarla como ganadora y fuera a vivir en paz... La ejecutaron, como símbolo de que los juegos se han acabado para siempre. Y que es un largo y tortuoso recuerdo que perdurará en nuestras memorias durante largo tiempo. 

La verdad es que estoy muy sorprendida, estoy viva. Y todo gracias a un anciano que me llevo a su cabaña en el bosque y me cuidó durante todo el tiempo que estuvo, hasta que sin motivo aparente...Desapareció. 
No recuerdo su nombre, pero si su cara. No me olvidaré de su afable rostro sonriéndome y esas arrugas en las comisuras de los labios que se arqueaban al ver que mi salud mejoraba. Todo este tiempo he vivido de la caza, sorprendente. ¿Verdad? Se supone que la cazadora nata era mi hermana Katniss, pero por circunstancias he tenido que aprender a la fuerza, y gracias a la caza y a ir mendigando por pequeños pueblos pude hacerme un arco y las flechas e ir sobreviviendo con lo mínimo. Ahora entrar en los bosques es legal y me he enterado de que Gale es un alto mando del ejército y vive bien. Katniss vive en la aldea de los vencedores con Peeta, de vez en cuando salen en la tele y bueno. Caesar...Bueno Caesar murió por enfermedad y ahora el presentador es otro.

Sigo viviendo en el bosque, no muy lejos del distrito 12 y la verdad es que nunca me he atrevido a ir a visitar a Katniss después de estos años. Pero hoy, es su cumpleaños y me dispongo a ir a su casa, veo el distrito más alegre, sigue existiendo el quemador pero se nota el ambiente relajado sin la vigilancia de los agentes de la paz, a veces me paso por el puesto de Sae pero ahora el dueño de ese puesto es otra persona porque Sae murió.
Camino por la plaza hasta pasar de toda esa cantidad de gente y llego hasta mi antigua casa, ahora me pregunto ¿Qué habrá sido de Lady? Pobre cabra. Le tenía mucho cariño.
Entro en la aldea de los vencedores y todas las casas están habitadas veo luces niños jugando y gente feliz, me pongo delante de la casa de Katniss, toco la puerta y tras unos segundos oigo unos pasos y veo a una chica alta, sonriente y con esos característicos ojos grises suyos. Su expresión es de asombro y alegría al mismo tiempo, veo detrás a dos niños jugando con coches, la miro y digo:
-Hola, Katniss.

Ella llora y nos fundimos en un intenso abrazo.

viernes, 10 de enero de 2014

Los elegidos por los Dioses. 25.

Estoy confuso, si quiero a Kath ¿por qué me he besado con Lea? No lo entiendo, mi cabeza es un lío y quiero aclarar esta duda. Le gusto a Lea, no sé si me gusta. Pero quiero a Kath, pero Kath tiene amnesia y no estoy seguro de que siga sintiendo lo mismo que antes. Decido irme porque no puedo más.Debería ir a visitar a Kath aún es pronto. Tardo unos 20 minutos en llegar al hospital.
Lo primero que veo es a todo el hospital corriendo de un lado para otro con bolsas de sangre en la mano, con sueros, máquinas extrañas...
Estoy preocupado, a lo mejor ha pasado algo muy grave y lo que es peor, le ha podido pasar algo a Kath y a Matt. Corro lo más rápido que puedo, subo los tres pisos a toda velocidad. Quedan pocos metros para llegar a mi destino, 10, 6, 2 metros. Llego abro la puerta estrepitosamente y la imagen me parte el alma. Kath llora desconsoladamente y parece que el motivo es que Matt no está.
- Kath, Dios mio. ¿Qué ha pasado?
-No lo sé--Dice entre sollozos.--Todo ha pasado muy rápido, Matt ha empezado a convulsionar, a gritar como un loco...Estaba llamando a los médicos pero no venía nadie, luego vino una doctora y los enfermeros se lo llevaron a otra camilla y no sé nada más.
Mierda.
-Joder, ¿a ti te ha pasado algo?--Pregunto con impaciencia.--¿Estás bien?
-¡No!
-Voy a ver como está Matt.

Corro lo más rápido que puedo mirando puerta por puerta pero no hay nada, solo queda un puerta y ahí están los médicos y en la camilla Matt con una mascarilla en la cara y muchos tubos al rededor suyo. Me fijo en el monitor y su pulso está extremadamente alto. Los médicos no me dejan ver nada pero parecen preocupados y eso me altera más porque Matt fue el primer habitante de esta ciudad que conocí. Que me salvó la vida. Nunca llegaré a agradecérselo. Sin duda es de las mejores personas que he conocido en toda mi viday ahora se debate entre la vida y la muerte.

Forcejeo con dos médicos que me empujan hacia la puerta con todas sus fuerzas. Pero un sonido continuo nos para a todos.
El monitor indica que el pulso de Matt se ha parado por completo. 0. Matt ha muerto.

jueves, 9 de enero de 2014

Racismo y desigualdad.

El racismo, solo escribir la palabra me hace sentir asco. No puedo creer que a día de hoy mucha gente siga creyendo que la gente de un país diferente al suyo es inferior. No me lo creo, es una mentalidad cerrada y que quita las posibilidades de  mejorar como persona. Menospreciar a alguien por el color de la piel o su procedencia me resulta imposible, no todos los extranjeros son buenos, pero eso no es motivo para tachar a todos como "delincuentes", "molestos" o incluso he llegado a oir "cucarachas" no me cabe en la cabeza. Hay que ser tolerante con todo el mundo, no todos somos buenos, hay gente muy mala por el mundo y que da una imagen muy mala.

El ser humano es alguien estúpido que en pleno siglo XXI siga pensando que determinadas personas, o etnias son superiores a otras. Y no solo con la nacionalidad. También con la religión. No quiero señalar a ninguna en particular pero por ejemplo la religión católica tacha a los gays y no los consideran dignos. Yo soy creyente pero no me incluyo en una doctrina tan sumamente estúpida como esta. No quería despotricar contra nadie pero es mi opinión y tengo libertad para expresarla. Una persona homosexual es un humano como tú y como yo y no es inferior solo porque le gusten las personas de su mismo sexo y mucho menos es una enfermedad. Ha habido casos en que homosexuales se han sentido cohibidos por su religión (sea cual sea) por miedo a ser rechazados por su gente o simplemente por no respetar los mandamientos de su religión. Es respetable que cada religión tenga sus mandamientos pero de ahí a hacer pensar a una persona que se sienta atraída por personas de su mismo sexo hay mucha diferencia. No sé si me explico. Podría decir que todos los curas son unos violadores, pederastas entre otras cosas, porque se han dado muchísimos casos de niños con traumas debido a haber sido violados por determinados sacerdotes. Pero no lo digo porque generalizar en eso está mal. No todos son así, y por esa misma razón no hay que hablar sin saber. Y hasta aquí ha llegado mi mala hostia.

sábado, 4 de enero de 2014

Los elegidos por los Dioses. 24.

No olvidaré este momento en toda mi vida. Quiero a Kath pero Lea tiene algo que me atrae, y lo peor es que no sé lo que es. Las palabras que le he dicho a Kath las siento de verdad. O eso quiero creer. Pero a lo mejor ella ahora no siente lo mismo por mi . Pero aprovecharse de la amnesia de ella es muy rastrero. Tengo tiempo para pensar, me dirijo al campo de entrenamiento. Cuando llego la clase está apunto de empezar. Me coloco entre Vin y Lea, vaya. Mario nos dice que nos toca entrenamientos por parejas. Estoy buscando a alguien pero sin aviso Lea me coje del brazo fuertemente y me tira hacia ella. No sé porque pero estoy muy nervioso. Joder, esta chica me pone nervioso.
-Vamos, acércate. Que no muerdo, a menos de que la situación lo requiera.--Dice ella.

Me acerco con cautela y la miro de arriba abajo, intento no parecer nervioso y la verdad es que es muy guapa.
-Alumnos, esta sala es muy grande.--Dice Mario.--Así que os repartiréis por toda la sala y pelearéis el uno contra el otro.

Recuerdo este ejercicio, fue el primer contacto físico que tuve con Kath, una ola de recuerdos me viene a la cabeza y hace distraerme. Ya es mala suerte que tenga que pelear contra Lea, no sé si podré darle algún golpe. Estoy mareado.

-Vamos Eick, demuéstrame de lo que eres capaz.
-Vamos.--Digo en tono amenazador.

Ella toma la iniciativa, me lanza una patada directa a la cara, parece ser muy flexible y me distraigo un momento. (Porque será). Pero la esquivo, me agacho y barro su pierna con un ágil movimiento que la hace caerse de bruces. Una sensación de superioridad me invade el cuerpo. Pero la alegría dura muy poco sin darme cuenta se levanta y me pega un puñetazo en la mejilla que hace que me retuerza de dolor y vea todo oscuro durante unos segundos. Siento su peso encima de mi y me pega puñetazos mientras estoy en el suelo. Pero a duras penas consigo cogerla por las muñecas, le pongo la planta de mi pie en su vientre y la tiro por los aires, noto que los demás alumnos nos miran. Incluido Mario. Lea me mira con furia y se lanza hacia mi, siento su rodilla impactar con mi estómago me deja sin aire pero reacciono rápido y me coloco rápidamente detrás suya; la cojo por el cuello y la tiro al suelo con todas mis fuerzas.

-Ya está bien, ya ha terminado el entrenamiento por hoy.--Corta Mario.-- Iros ya, todos.

Nos vamos y toda la  adrenalina se desvanece y el cansancio me invade. Me voy al bosque para relajarme un poco. Al cabo de un rato oigo unos pasos, me giro rápidamente y es Lea, con vendas en los brazos y moratones en la cara.
-Campbell.--Dice.--Mira como me has dejado.
-Lo siento.--Añado fríamente.
-No nos engañemos, no lo sientes pero me da igual. Eres un chico con carácter y que por lo visto sabe defenderse.--Se acerca a mi hasta que solo unos pocos centímetros separan nuestras caras.-- ¿Y sabes qué? Eso es lo que más me gusta de ti. Si, Eick. Que te quede claro, me gustas. Pero estás con Kath, no tengo posibilidades. O bueno, ahora tiene amnesia. ¿Verdad? Ya veremos lo que pasa.

Y me besa apasionadamente y  se va dejándome en medio del beso. Me hace tener dudas, y lo peor es que el beso me ha gustado.